Foto de fin de año

Un vistazo a las campañas electorales al cierre del 2015

Según la encuesta de GFK, publicada ayer, Acuña ha consolidado su segundo puesto en el interior del país que ya habían advertido otras encuestadoras, y PPK resiste desde su aún sólida posición en Lima. Hay que ver, si la aparición del PPC en campaña y de Solidaridad Nacional –con su novísimo candidato, Nano Guerra García- logran debilitar esta posición de Kuczynski.

Hay otro dato relevante que es el porcentaje que obtiene el candidato Julio Guzmán. Obtiene 7% en el sector A/B –ubicándolo en cuarto lugar en este sector- y aparece con 3% en el sector Urbano y en Lima. Su intensa campaña por internet parece que comienza a cosechar frutos en algún sector juvenil.

Así llegamos a fin de año con Keiko Fujimori consolidada en el primer lugar, con Acuña acosando a PPK, con García estabilizado en el cuarto lugar, Toledo en descenso firme y algunos candidatos haciendo un esfuerzo por recuperar terreno (Urresti, Mendoza, Guzmán).

Entonces veremos cómo afectan las planchas en las posiciones para Enero. Entre ellas hay algunas que parecen aportar y otras que son cuestionadas. Hay dos que llaman a sorpresa y las dos por la participación de los fundadores de Fuerza Social, ese experimento izquierdista que demostró su poca eficiencia en la gestión pública. Vladimiro Huaroc, convocado por su trabajo en solución de conflictos durante este gobierno y olvidándose de su mala gestión en Junín como Presidente regional, ha sido convocado nada menos que por Keiko Fujimori en ese esfuerzo por buscar el centro.

Y Susana Villarán que se ha sumado a la candidatura de Daniel Urresti, militar en retiro que está siendo procesado por el asesinato de un periodista y que representa un pensamiento autoritario muy alejado de lo que la desastrosa ex alcaldesa de Lima predica. ¿Puede Urresti encabezar un frente anti Keiko, como lo plantea la Villarán al anunciar su retorno a la política, siendo es el más claro representante del fujimorismo sin un Fujimori?

Pero la pregunta que permitirá desenredar estas elecciones, es si la llamada Alianza Popular logra conectar con los ciudadanos. Alan García y Lourdes Flores son sin duda los más representativo entre la política tradicional. Sólidos ideológicamente, destacada oratoria y capacidad polémica, deberían posicionar rápidamente su proyecto después de algunas situaciones iniciales que mostraban que no había un discurso único entre los miembros de los dos partidos. Su oferta de un gobierno predictible basado en la trayectoria de ambos partidos debería lograr la confianza de un sector mayor del electorado.

Sin duda hacia finales de enero, el tablero se habrá modificado y veremos en cuanto afectan los errores cometidos al momento de confeccionar las planchas y de elegir a los candidatos al Congreso.

Por: Juan Carlos Valdivia