Mario Saldaña

Facultades: ¿necesidad o amenaza?

Facultades: ¿necesidad o amenaza?
Mario Saldaña
30 de abril del 2015

Cateriano debería concertar antes que tensar relaciones con pedido de facultades.

La forma y la oportunidad en que Pedro Cateriano solicitó al Congreso facultades legislativas fueron erradas, si en verdad tal propósito va en serio. Pienso más bien que el Presidente del Consejo de Ministros (PCM) pidió 100 para obtener 50, esto es, necesitaba asegurar la investidura.

No obstante, hay quienes han visto en el pedido más que un recurso de negociación una presión y una amenaza velada al Legislativo. Cateriano tenía y tiene esa posibilidad, es decir, el Gabinete puede -constitucionalmente- hacer una cuestión de confianza ante el Congreso por las facultades legislativas, y en consecuencia, tendría que dimitir si se la niegan. En tal escenario, y hasta el 28 de julio, el Presidente de la República podría disolver el Congreso y convocar a elecciones parlamentarias.

Dudo que el Gobierno esté  jugando a plantear una amenaza velada. Sería una absoluta irresponsabilidad frente al país. La pregunta que uno se tendría que hacer en tal circunstancia sería si es indispensable para el Ejecutivo contar con nuevas o más herramientas legales en los tres rubros señalados por el Gabinete (reactivación de las inversiones, política social y lucha contra la inseguridad, el narcotráfico y la corrupción), o si el déficit es más de gestión y de voluntad política.

Independientemente que tal amenaza sea o no real, la pelota está de lado de la oposición. Y ello supone solicitarle al PCM una nueva ronda de conversaciones para que éste explique con precisión, es decir, con los proyectos de normas en la mano, qué, cómo, por qué y cuánto cuesta cada iniciativa.

En el rubro política social, y ad portas de una campaña electoral, cualquier cambio que suponga el uso o canalización de recursos públicos hacia determinados sectores es inadecuado e incorrecto. Los programas de lucha contra la pobreza existen y deben continuar según se ha planeado. Pero sería muy interesante, por ejemplo, que Cateriano explique, con un Fenómeno del Niño leve en ciernes, qué ha hecho el Gobierno en más de un año con los casi 3000 millones de soles que el exministro Castilla anunció para la prevención de desastres. ¿Qué fue de ese dinero?. ¿Hay resultados que exhibir?

En el tema económico, si el objetivo es destrabar las inversiones eliminando o reduciendo trámites y exigencias a los privados, pues en buena hora. ¿Eso requiere nuevas normas o más bien algunas decisiones que, dicho sea de paso, ya están en la agenda del Legislativo durmiendo el sueño de los justos? ¿No es que el nodo del problema acá es la ausencia de confianza de los inversionistas? ¿Darle viabilidad a Tía María no sería una señal que valdría mucho más que varios millones de hojas en El Peruano?

En cuanto a seguridad, lucha contra el narcotráfico y corrupción, bien haría el PCM en acordar con las agrupaciones políticas una “hoja de ruta” de reformas cruciales, pensando en el próximo Gobierno.

La senda de Cateriano debería ser concertar acciones antes que tensar relaciones con un pedido de facultades tan innecesario como inoportuno.

 

Por: Mario Saldaña C. (@msaldanac)
30 - Abr - 2015  

Mario Saldaña
30 de abril del 2015

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