¿Desgracia?

Desgracia: situación que produce gran dolor y sufrimiento

La naturaleza viene golpeando duramente al país. Es cierto, como lo es el hecho que desde hace meses sabíamos que había un Fenómeno de El Niño en camino. ¿Que hizo el Ejecutivo en coordinación con los gobiernos subnacionales para prevenir desgracias como las que estamos viendo?

Porque, seamos claros, la topografía y el clima del Perú hacen que ciertos fenómenos naturales se repitan cada año, con mayor o menor intensidad. Durante el verano, producto de intensas lluvias, ocurren huaicos que destruyen todo a su paso. En invierno, el friaje ataca la sierra sur y tenemos cientos de niños y ancianos que mueren por el frío y las enfermedades. Sin embargo, no hemos logrado que el Estado responda implementando políticas necesarias para limitar los impactos negativos de los fenómenos naturales y salvaguardar la vida y la salud de los peruanos.

Hemos sido testigo de terribles escenas de padres que luchan desesperadamente, aferrados a sus hijos para salvarlos del agua que se lleva todo a su paso. Hemos visto carreteras bloqueadas, puentes destruidos, ciudades sumergidas en agua, animales arrastrados por los huaicos y familias que lo pierden todo. ¿Cuantos peruanos han perdido la vida en lo que va del verano a consecuencia de los huaicos?

Las autoridades locales saben que es necesario limpiar el cauce de los ríos, darle mantenimiento a los muros de contención y a los puentes. Sin embargo, esto rara vez se hace a tiempo o bien. ¿Por qué, si se sabe cuál es el cauce de los huaicos, las autoridades siguen permitiendo que familias de escasos recursos se instalen y construyan en zonas de alto riesgo, con el peligro que esto significa y el costo que deberá asumir el Estado luego para protegerlos? ¿Por qué la inversión en infraestructura es tan defectuosa en el Perú? Falta de dinero no es. ¿Por qué al norte de la frontera no vemos la destrucción que vemos en Tumbes y Piura? La respuesta es clara: infraestructura adecuada y medidas de prevención coordinadas y ejecutadas con eficiencia. En el Perú, tenemos un Estado disfuncional y sin la capacidad de responder a tiempo.

Mientras todo esto ocurre, el presidente de la República considera que sería una desgracia que el Perú no cumpla su compromiso de realizar los Juegos Panamericanos. ¿Desgracia? Toda inversión pública debe generar un retorno. ¿Cuál es la rentabilidad de invertir aproximadamente S/. 4,125 millones en los Juegos Panamericanos? Me adelanto: negativa. Más aún, dada la disfuncionalidad del Estado peruano, dudo que logremos acabar a tiempo. Pero la discusión es equivocada porque, tal como han señalado los ministros Zavala y Thorne, no se trata de un problema de dinero, sino de gestión pública. Sin embargo, considerando la necesidad de señales políticas que nos hagan saber que tenemos gobierno, el Ejecutivo debió renunciar a la realización de los Panamericanos ni bien se instaló.

Por cierto, a pesar de tener dinero, el 90% de la red vial departamental peruana, aquella que conecta las capitales regionales con las de provincias, aún no ha sido pavimentada. El 97% de los hogares en Pasco tiene inadecuada calidad de agua; 93% en Ucayali, 90% en Amazonas y 87% en La Libertad. Solo el 41% de los colegios públicos a nivel nacional tiene servicios básicos (luz, agua y saneamiento); a nivel rural solo llega al 24%. El 92% de los colegios públicos en Loreto no cuenta con ellos; 89% en Ucayali, 80% en Madre de Dios. Para cerrar la brecha en infraestructura de agua y saneamiento, el Estado peruano deberá invertir hasta el 2021 US$ 12,252 millones; y para transporte, US$53,799 millones. Digo, para poner las cosas en perspectiva.

María Cecilia Villegas