Martin Santivañez

Derecho es lo que dicen los jueces

Derecho es lo que dicen los jueces
Martin Santivañez
05 de diciembre del 2014

El Derecho y la elección del Dr. Víctor Tinoco como presidente del Poder Judicial

Es una buena noticia para la comunidad jurídica peruana el nombramiento de Víctor Ticona como Presidente del Poder Judicial (PJ) porque su elección consolida el principio de independencia que debe regir en nuestra judicatura. Los jueces tienen que consolidar su auctoritas para evitar las interferencias políticas e ideológicas que impiden la expansión de una justicia de calidad.

Sí, el Derecho, suma de posiciones según la clásica definición orsiana, es una techné, es decir, una técnica pragmática. El Derecho presupone así una técnica de realizar lo bueno, y esta técnica implica un operar en las cosas o las personas. De allí la feliz frase que tanta gloria trajo a los clásicos: ars longa, vita brevis, experientia fallax, ocassio praeceps, iudicium difficile. La vida es corta, el arte, LA CIENCIA ES LARGA, la ocasión súbita y el juicio, el juicio siempre es difícil. Estos aforismos son de oro para los juristas. Naturalmente, la técnica del Derecho, como la técnica de la medicina, no puede concebirse sobre uno mismo. En tanto nomóforos, es decir, portadores de Derecho, hemos de proyectarlo hacia la comunidad política, convirtiendo a la técnica en un patrón de gobierno de las conductas sociales. Todo gobierno es, en sí mismo, una técnica, y el gobierno de la ciudad una techné politiké.

Allí dónde hay un juez, hay una declaración de IUS. Por eso, el gran jurista Alvaro d’Ors sostuvo, con acierto, que aquello que en un juicio funcional al Derecho y la ética se declare justo, eso es derecho, el DERECHO con mayúsculas. Como solemos llamar JUECES a los que hacen tales declaraciones, podemos definir el Derecho como AQUELLO QUE DECLARAN LOS JUECES (Ius, quod judex dicit). Y como eso que declaran los jueces es lo que parece justo, todo este razonamiento nos conduce a la sencilla definición orsiana, hoy ya clásica para los hombres de leyes que creemos en una teoría realista del Derecho: Derecho es lo que aprueban los jueces.

Este realismo nos aleja, por lo demás, del estrecho corsé del positivismo jurídico, de la ingenuidad parnasiana del idealismo legalista y de ese determinismo crematístico y cosificador que encarna el análisis económico del Derecho. Ahora bien, la realidad demuestra que todos somos capaces de emitir opiniones aceptables acerca de lo bello o lo bueno y también sobre lo justo, sin tener una idea muy clara de lo que sea la belleza, la bondad o la justicia. Sería francamente temible, como afirmaba Roscoe Pound, que los jueces declararan una huelga de brazos caídos en espera de que los filósofos del Derecho les suministraran una definición incontrovertible de la justicia.

La virtud de la justicia está en esa buena intención de reconocer lo justo en cada caso, sin claudicaciones. El juez que aprueba Derecho en función a la virtud de la justicia crea Derecho, consolida al Derecho y rinde un servicio a la maiestas, a la majestad de la nación. De allí el apotegma que la escolástica jurídica promovió durante el medioevo: han de gobernar, han de legislar y han de juzgar “qui in virtute intellectiva excedunt”, esto es, los más inteligentes, los más preparados, los mejores. Siempre los mejores. La meritocracia es, por tanto, la condición fundamental de la independencia. El independiente lo es en virtud a su saber personal socialmente reconocido, a la auctoritas propia del que conoce el Derecho. El jurista es un hombre de auctoritas, un ser de autoridad, por su dominio de la técnica jurídica. Así, solo los mejores, por independientes, son capaces de materializar en la sociedad el lema de los buenos abogados: orabunt causas melius.

Si aspiramos a un Poder Judicial fuerte, en el que se ensalce la excelencia y se defiendan las causas mejores, hemos de apostar por la independencia de los jueces y la defensa de su autonomía. Enhorabuena, pues, al Poder Judicial por este ejercicio de independencia y autoridad.

Por Martín Santiváñez Vivanco
(05 - dic - 2014)

Martin Santivañez
05 de diciembre del 2014

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