Delincuencia y continuidad democrática

Sobre últimas medidas contra la inseguridad y los nuevos mandos militares

Se conjugan la inseguridad ciudadana y la preocupación por la continuidad democrática pacífica y sin sobresaltos, imprescindible para retomar la senda perdida del  crecimiento y el desarrollo nacional.

En saludable (pero tardío) cambio de actitud, impulsado por el actual Ministro de Interior, el gobierno abandonó la irresponsable tesis de la percepción infundada y, reconociendo la gravedad del problema, promulgó un paquete de normas legales aspirando a empezar a revertir la inseguridad.

El paquete en su conjunto es positivo, pero insuficiente incluye normas positivas, saludos a la bandera y disposiciones que no requerían un DL. El aumento de penas es siempre un recurso efectista, pero solo tendrá efectos reales cuando la PNP, el MP, el PJ y el INPE funcionen a cabalidad y para eso, ya se les pasó el tren, tarea para el próximo gobierno.

Una innecesaria nueva Ley de Seguridad Privada, ha retirado (artículo 11) la exigencia del uso de vehículos blindados en el transporte de valores y eliminado, exclusivamente para esta modalidad de servicios, la posibilidad de que el reglamento especifique más requisitos. Error de redacción subsanable con fe de erratas o ¨smart lobby¨. Si se pretendía bajar barreras de acceso para ampliar la oferta, el precio en vidas humanos será alto. No vaya a ser que encubra un favor a los amigos de la promoción que no han podido ser ¨atendidos¨ o un intento de generar recursos directamente recaudados por la PNP y las FFAA, a través de una participación inconstitucional no supletoria en la actividad económica.

El esperado fin de la policía de alquiler, se ha resuelto a medias (es decir no se ha resuelto) prohibiéndoles trabajar para particulares, lo que está bien sin generar de inmediato la remuneración llamada a reemplazar el pago que vienen percibiendo de terceros. La implementación de bonos es una solución temporal que debió hacerse hace 4 años, pero no puede ser gradual porque ninguna entidad financiera ni educativa aceptará el no pago de obligaciones del personal policial. Se sigue soplando la pluma al próximo gobierno, responsabilidad que, para ser justos, recae sobre el MEF.

El resultado va a ser una desobediencia masiva, prestación informal de servicios. Y como ya sabemos, la informalidad no tiene frontera clara con la ilegalidad.

Se conjugan la aparente doble nacionalidad (tan útil siempre al fugar) con el sospechoso cambio de actitud de la antes esquiva supuesta propietaria y autora de la agenda. Pronto sabremos, por sus consecuencias, si fue casual o intencional la judicialización de la mayor parte de temas contra quien aún tiene acceso, desde el poder, a convidar zanahoria jugosa o blandir la amenaza con palo grande.

Hay creciente preocupación por la insistencia presidencial en ascender y entregar mando de tropa a miembros de su promoción, justo cuando le toca irse. Es evidente que el propósito (más allá de su viabilidad) trasciende la gratitud o aprecio promocional. ¡Cuidado! En caso de conmoción social por causa climática o deliberada desde el gobierno o desde fuera, en ellos reposará en mucho la gobernabilidad y la realización de elecciones.

Por: Dardo López-Dolz