¿Cuánto tomará el aprendizaje?

El Ejecutivo ha perdido cien días y no da señales de enmendarse

Carlos Moreno, que fuera consejero presidencial, no era funcionario público según el presidente Kuczynski. Según el primer mandatario, Alfredo Jalilie tampoco lo es, a pesar de que su contratación fue anunciada por el mismo jefe de Estado. Eto Cruz, convocado para una comisión que preparará un proyecto de nuevo Código Procesal Constitucional, tampoco es —según el viceministro de Justicia— funcionario público. La informalidad ha llegado a los más altos niveles del Estado. En el gobierno pepekausa han encontrado una fórmula para evitar responsabilidades: nadie es funcionario público.

Si hay algo notorio en la administración Kuczynski es que la asesoría jurídica del gobierno anda de vacaciones. Fue evidente en el manejo del caso de Carlos Moreno, y lo es cada vez que el presidente hace algún anuncio. Hace poco, en entrevista con Enrique Chávez (en Canal 7, TV Perú) por los cien días de su gobierno, el presidente le aseguró a su entrevistador que el Consejo de Estado era una figura constitucional. Cuando Chávez respetuosamente lo corrigió, PPK se ratificó y lo mandó a leer la Constitución. ¿Qué Constitución lee el presidente? ¿La ministra de Justicia no le ha explicado lo que contiene y lo que no contiene nuestra Constitución?

El domingo pasado el presidente anunció que propondrá una nueva composición del Consejo de la Magistratura, y también cambios en los periodos de vigencia de los directores del Banco Central de Reserva. Supone que todos deben seguir sus planteamientos, entonces lanza propuestas de cambio constitucional que no están siquiera consensuadas con otros grupos políticos, sabiendo que no tiene los votos necesarios para ello.

Hay pues una mezcla de soberbia, falta de una correcta asesoría jurídica y entusiasmo algo ingenuo en el estilo de gobernar. Por ejemplo, algunos de los cambios efectuados en el Código Penal, a partir de la delegación de facultades, ya han sido cuestionados por expertos penalistas, que los encuentran repetitivos y beneficiosos para los criminales. ¿Quién revisó esos decretos legislativos?

El proceso de aprendizaje de aquellos que han aceptado acompañar al presidente Kuczynski en su gobierno está siendo costoso y afecta la correcta toma de decisiones; y con ello la empatía de la ciudadanía con su presidente. Han perdido cien días y no parecen mostrar propósito de enmienda. El problema es que estamos repitiendo prácticas de gobiernos anteriores, en los que al Ejecutivo le faltaba control por parte del Legislativo. En el Parlamento se repiten las reuniones que responden a una agenda mediática, pero no se hace un permanente seguimiento de las acciones del Ejecutivo. Con un Ejecutivo inexperto y un Congreso que no fiscaliza, vamos a continuar el desprestigio de la democracia. Estamos advertidos.

Juan Carlos Valdivia