Carlos Sotomayor

¿Crónica de una muerte anunciada?

¿Crónica de una muerte anunciada?
Carlos Sotomayor
24 de febrero del 2016

¿Quedará fuera la candidatura de Julio Guzmán?

Las leyes, las normas y toda regla están hechas para cumplirse. Y así debe ser. ¿Verdad de Perogrullo? Lo es. El tema es que el candidato Julio Guzmán, de Todos Por el Perú, está muy cerca de ser retirado de la contienda electoral por incumplir un requerimiento burocrático. Esto ha desatado la furia del candidato morado y la de sus seguidores, quienes empezaron a hablar de campañas siniestras, de poderes fácticos influyentes e, incluso, de fraude electoral.

Vayamos por partes. Si nos ceñimos a las reglas, que todos deben seguir, como lo ha señalado el Jurado Nacional de Elecciones (y luego del JEE), no existe pataleta ni vociferaciones que oculten lo inobjetable de su descalificación. Hasta aquí toda campaña maquiavélica en su contra carece de sustento.

Lo extraño del asunto, a mi criterio personal, es la lentitud del JNE. No debería tener un plazo prudencial –por la buena salud de un proceso electoral– para dictaminar qué candidatos no cumplen los requisitos formales y quiénes pueden entrar ya en carrera. Una carrera limpia de suspicacias como esta. ¿Sacar de la cancha a un jugador que estuvo mal inscrito cuando el partido ya se está jugando?

Decir esto último puede granjearme, lo sé, ataques de los anti-Guzmán, quienes como muchos de sus seguidores parecen fanáticos del fútbol a la hora de enarbolar consignas desprovistas de argumentaciones serias. Por ejemplo: no es poco serio acusarlo de ser el candidato oculto del Nacionalismo (o del Humalismo o del Nadinismo, etc).

¿Es un argumento sólido justificar tal afirmación por unas fotografías? ¿Por haber sido parte del Ejecutivo durante el gobierno Nacionalista? ¿PPK sería el candidato oculto de Perú Posible? No le encuentro la lógica. ¿Por tener en su lista de candidatos al Congreso a personas que han contratado con el Estado durante este gobierno? La mayoría de las cuales ha venido brindando servicios al Estado desde administraciones pasadas (García, Toledo).

Decir que es el candidato del PNP es una ridiculez cuando lo más evidente es que detrás de su candidatura existen intereses económicos y empresariales más visibles. Y eso es lo preocupante. ¿Qué poderes económicos están detrás? Porque no, amigo anti-Guzmán, no me gusta el color morado –salvo en octubre cuando Alianza adopta ese color–, y no pienso votar por Guzmán. Mis razones van por otros rumbos. La ausencia de un partido articulado. La administración actual es una prueba de lo ineficiente que puede ser un proyecto personalista sin un cuadro importante que sostenga al gobierno. Y en ese sentido, un candidato que dice y se desdice constantemente sobre su plan de gobierno no me da ninguna seguridad.

Por Carlos Sotomayor

 
Carlos Sotomayor
24 de febrero del 2016

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